Ledicia Sola —sí, Ledicia, con «d» por mucho que algunos se empeñen en hacerla tocaya de la reina— es una actriz gallega, muy conocida, tanto en su tierra natal, gracias a sus múltiples intervenciones en series de la televisión gallega, como a nivel nacional, por sus apariciones en series de gran audiencia —Gran Reserva, Amar es para siempre…— y en diversas películas y cortometrajes.
Si tuviera que definir a Ledicia como actriz, diría que es talentosa, metódica, trabajadora y muy versátil. Todas estas virtudes, unidas a su belleza y rasgos mediterráneos, la hacen perfecta para múltiples papeles; y es que Ledicia Sola es igual de creíble interpretando a una musulmana, a una vendedora de pisos gallega, a una fría empresaria mexicana, a una dicharachera azafata o, más recientemente, a una prostituta.
2014 ha sido para ella un excelente año, pues ha estrenado dos películas que están funcionando estupendamente tanto a nivel de crítica, como de público —A Esmorga y Los fenómenos—, ha protagonizado un excelente cortometraje, con gran reconocimiento en Estados Unidos —A través del espejo—, ha estrenado la primera temporada de su nueva serie en la televisión galega —Pazo de familia— y aun ha tenido tiempo para hacer algo de teatro.
Para hablar de todo ello, quedé con Ledicia Sola y descubrí otra de sus virtudes: es una excelente conversadora —inteligente, amena, culta y con un gran sentido del humor—, una de esas personas con las que da gusto charlar. Y para muestra, ahí va el resumen de lo que hablamos, ¡que lo disfrutéis!
¿Cómo surgió en ti el deseo de ser actriz?
Lo mío es vocacional. Siempre quise ser actriz y desde pequeñita ya cantaba, actuaba, montaba mis propios números, me aprendía poesías y las recitaba, escribía… Mi lema en Twitter es: «De pequeña, quería ser escritora, cantante y actriz. Por ese orden…aunque siempre fui muy de hacerlo todo al revés». De momento, soy actriz, las otras dos cosas aún no han llegado, pero vendrán, seguro.
Eres orensana y has desarrollado buena parte de tu carrera en Galicia, ¿dónde te formaste como actriz?
Cuando decidí estudiar para convertirme en actriz, aún no había abierto la RESAD de Vigo, así que decidí probar suerte en Madrid; hice las pruebas aquí, me aceptaron y a Madrid que me vine con 18 años.
Mientras estaba estudiando, hice algunas cosas en salas alternativas de Madrid y cuando estaba terminando en la RESAD, me presenté para el casting de Galicia Exprés, una serie diaria, de las primeras que se hizo en Galicia. Me cogieron y me dieron un personaje fijo —Uxía—. Esa fue mi primera serie y constituyó un aprendizaje alucinante, a partir del cual ya empecé a hacer otras cosas.
Galicia últimamente está aportando muchos y muy buenos actores. ¿Crees que eso es debido a la influencia de la TVG —la televisión autonómica gallega— y la gran cantidad de series que produce?
Efectivamente, la televisión gallega apostó mucho por la ficción, se hicieron muchas series y eso creó una cantera de actores que luego hemos empezado a trabajar a nivel nacional.
En todo caso, no sé si esa cantera será exclusivamente debida a la televisión, porque en Galicia hay mucho movimiento: hay también muchas compañías de teatro que sacan adelante sus espectáculos y los actores que viven allí compaginan mucho teatro con la televisión. Además, en Galicia se ha hecho mucho cine, y bastantes producciones a nivel nacional se han ido a rodar allí, con lo que gran parte del equipo que trabajaba era gallego.
A nivel nacional, a menudo se tiende a creer que solo son populares los actores que hacen cine o televisión en producciones nacionales, pero no reparamos en que hay muchos actores no muy conocidos, pero que, gracias a las series autonómicas, son enormemente populares en su comunidad autónoma. ¿Es cierto?
¡Totalmente! Hay un pequeño «star system autonómico» (risas). En Galicia pasa mucho, porque hay actores que llevan muchos años trabajando solo allí. Para el público de la televisión gallega, son como de la casa, les conocen de toda la vida, y, sin embargo, no son conocidos a nivel nacional.
¿Qué es lo último que has hecho para la TVG?
Acabo de terminar de rodar la primera temporada de una nueva serie de la TVG, llamada Pazo de Familia, que está funcionando muy bien, emitiéndose en horario de máxima audiencia y compitiendo al mismo nivel con las series de los grandes canales nacionales. Espero que nos den la alegría de una renovación para una segunda temporada.
¿Cómo es el día a día de rodaje en una serie como esta, rodáis todos los capítulos seguidos?
No, ¡ojalá! Rodamos todos los días, pero las secuencias que te tocan están descolocadas: puedes hacer tres secuencias del capítulo 5, luego una secuencia del capítulo 1 y vamos abriendo y cerrando capítulos a medida que vamos terminando las secuencias.
El tema de la continuidad es bastante complicado, imagínate en series como esta, con capítulos de 70 minutos, que son casi como películas, tener abiertos ocho capítulos. Menos mal que los guionistas lo tienen todo muy controlado.
El «racord emocional» debe ser terrible ¿no? Puede que tengas que rodar la ruptura de una relación antes de rodar cómo os conocisteis.
Sí, jaja. Es un término que me encanta, porque con este ritmo, a veces, los actores no sabemos de dónde venimos, dónde vamos y en qué grado estamos. Imagina que aún no has rodado una secuencia muy importante para tu personaje, pero tienes que rodar la que viene inmediatamente después; te la estás jugando porque igual ya adelantes o marques algo que no deberías.
¿Y en las series diarias como Amar es para siempre?
Ahí todo va muy rápido: ruedas todo el día, llegas tarde a casa y te pasan un montón de hojas de guion, que te tienes que aprender a toda velocidad porque tienes que rodarlas al día siguiente. Además, en esta serie, mi personaje —Montse— era una chica muy locuaz y dicharachera, con lo cual mis diálogos eran enormes. Pero como yo soy carne de rodaje y me encanta mi profesión, disfruto con esto.
Si bien empezaste en la televisión y ahí es donde se ha desarrollado gran parte de tu carrera, siempre lo has simultaneado con el teatro. Háblame de tu faceta teatral.
Aunque comencé en la televisión, el teatro también me encantaba. Empecé con dos montajes para el Festival de Teatro Clásico de Mérida: Medea, de Eurípides, dirigida por Michael Cacoyannis con Nuria Espert de protagonista y al año siguiente la Pentesilea, de H. V. Keist, dirigida por Peter Stein. Imagínate, empezar trabajando con dos monstruos como Cacoyannis y Steien, que son parte de la historia del teatro, para mí fue una experiencia maravillosa, que me sirvió para curtirme y para aprender la profesión desde abajo. Además, yo estaba en el coro y trabajar al lado de la gran Nuria Espert y tener la oportunidad de verla trabajar cada día y de aprender a su lado, es un regalo para alguien que está empezando.
Eso me proporcionó una base teatral muy grande y, aunque volví a la tele y empecé a hacer cine, siempre he intentado simultanearlo con montajes teatrales.
¿Qué te aporta el teatro?
El teatro es un trabajo muy en profundidad, que a los actores nos gusta mucho realizar. Además, es una forma de ir sumando experiencias a tu currículo vital. Un actor no se hace solo con formación, sino que es un proceso largo —el gran Meisner, decía que lleva 20 años—, en el que las experiencias que se van viviendo y los personajes que se van interpretando, suman para irte haciendo mejor actor y poder transmitir más cosas a los nuevos personajes que tienes que encarnar.
Dentro del teatro, te has prodigado bastante en esa nueva modalidad que es el microteatro. ¿Qué tal ha ido la experiencia?
Muy bien. A mí me gusta mucho, porque la cercanía del público es única. Al ser lugares tan pequeños, con el público tan cerca, parece que estás haciendo cine; la interpretación tiene que ser muy pequeñita y muy naturalista y eso a los que nos gusta hacer cine, nos encanta. Pero, a diferencia del cine, aquí todas las tomas tienen que ser la buena, no puedes repetir y eso es un reto.
Televisión, teatro…y también cine. Curiosamente es donde menos has trabajado, pero despides 2014 con dos películas en cartel.
Sí, son cosas del cine. En estos finales de 2014 se han estrenado Los fenómenos, que rodé hace dos años y A Esmorga que terminamos en febrero de 2014. Cuando haces una película, los productores deciden si quieren sacarla directamente a cines o primero hacer un circuito de festivales y luego sacarla a cines. A Esmorga ha salido directamente a cines, mientras que Los fenómenos lleva un año haciendo el circuito de festivales.
Además, en este año, también hemos estrenado un corto maravilloso: A través del espejo, de Iván Mena, que ha conseguido el primer premio en el Festival Internacional de Manhattan y menciones en los festivales de Palm Springs y Oporto.
Háblame de A Esmorga…
Pues es una peli con la que estoy muy ilusionada, porque está siendo un exitazo en Galicia, las salas se están llenando y lleva cuatro semanas en cartel, algo increíble para una peli tan pequeña, en pleno mes de diciembre, compitiendo con todos los grandes estrenos navideños.
Es una película basada en la novela homónima de Eduardo Blanco Amor, que en Galicia es una obra de literatura emblemática. La acción transcurre en una noche de borrachera de tres hombres en Orense. Los papeles femeninos que hay son la gente con la que ellos van teniendo contacto. Yo hago de una prostituta que encuentran en un burdel al que van. Para mí es un cambio de registro que me ha gustado, porque a mí no me suelen dar esos personajes del lumpen (risas).
Y también acabas de estrenar Los fenómenos. ¿Cuál es tu papel en esta película?
Pues un papel un poco antipático, porque la película trata sobre la explosión de la burbuja inmobiliaria; la cuadrilla de «Los fenómenos» son los obreros que hacen las casas y yo soy la vendedora de los pisos, que cuando llegan los problemas, desaparece del mapa.
Creo que es una película muy bien hecha que cuenta cómo ocurrieron las cosas desde todos los ángulos —obreros, compradores, vendedores, promotores…—, sin posicionarse entre culpables e inocentes. Mi personaje en concreto, no es una mala persona, sino simplemente alguien que hace su trabajo sin ser muy consciente de las consecuencias del mismo. Además, es muy realista, porque gran parte de la cinta está rodada en Galicia, simultaneando castellano y gallego, reflejando la realidad lingüística que hay en Galicia; hasta el punto en el que hay escenas en que un personaje habla en castellano, el otro en gallego y mantienen una conversación, como ocurre en realidad.
¿Qué tal está funcionando la película?
Muy bien, estamos bastante contentos, porque estrenamos hace un par de semanas y aún se mantiene en cartel, lo que es una noticia estupenda. Como te dije antes esta peli había hecho el circuito de festivales durante un año y ya veníamos avalados por varios premios —premio en el Festival de Bruselas, tres premios en el Festival de Fortaleza en Brasil…—, pero, aun así, hasta que no se estrena con público no se sabe cómo va a funcionar y la respuesta está siendo muy positiva, tanto a nivel de público, como de críticas.
Y para terminar…la pregunta del millón para una actriz tan versátil. ¿Dónde te encuentras más a gusto: en cine, teatro o televisión?
Si yo pudiera elegir dónde trabajar, haría cine, porque allí lo sabes todo desde el principio. Tienes claro tu personaje, cómo es, sus motivaciones, conoces el desarrollo de la trama…eso nos da a los actores la oportunidad de llevar a cabo un trabajo más sólido, sin que eso te impida improvisar durante el rodaje, porque tienes tu personaje muy trabajado y dominado. Además, la adrenalina del rodaje engancha mucho (risas).
La televisión también me gusta mucho, pero como no tienes tanto tiempo para trabajar los personajes —porque te lees el guion hoy y mañana estás rodando esa secuencia—, tienes que improvisar más y no te encuentras tan segura. Y el teatro también me gusta por la profundidad del trabajo, pero lo veo más como un proyecto en el que meterte a fondo durante una temporada, que como algo continuo.
Información Bitacoras.com
Valora en Bitacoras.com: Ledicia Sola —sí, Ledicia, con “d” por mucho que algunos se empeñen en hacerla tocaya de la reina— es una actriz gallega, muy conocida, tanto en su tierra natal, gracias a sus múltiples intervenciones en series de la televisi..…