Katia Klein es un torrente de energía vital y creativa que la lleva a estar moviéndose constantemente en todas las facetas de la vida.
Creativamente todos la conocemos por sus trabajos como actriz, tanto en la televisión catalana donde es un rostro muy conocido (gracias a series como El cor de la ciutat o La Riera), como a nivel nacional, donde hemos podido verla en series de gran audiencia como Aída, Cuéntame o, actualmente Amar es para siempre. Además, no todo es televisión dentro de su carrera interpretativa, sino que Katia Klein también hace bastante teatro, y muy bueno por cierto, baste recordar su trabajo más reciente en la versión de Darío Facal del Sueño de una noche de verano de William Shakespeare.
Pero no se detiene ahí su labor creativa, sino que además, Katia es una magnifica pintora que ya ha participado en varias exposiciones donde ha mostrado su arte, algo que también ha hecho a través de sus ilustraciones en diversos libros y blogs.
Y como remate… ¡también es escritora! Este año acaba de lanzar su primer libro, Llámame rara, donde combina reflexiones personales con sus maravillosas ilustraciones. Una maravilla que os recomendamos desde ya como regalo navideño (si queréis quedar bien, claro está 😉
Pero su torrente vital no se detiene en el trabajo y la creatividad y Katia lo lleva a su vida diaria donde ha elegido el deporte como una de las válvulas para canalizarlo…y de paso, disfrutar y mucho.
Para conocer más aún a Katia Klein, hablar de todas estas facetas, y, por supuesto, entrenar, Paula y yo quedamos con ella hace un par de semanas. El día frío y lluvioso no invitaba a correr (o sí, pero para guarecerse), así que optamos por ponernos en manos de Paula para trabajar la fuerza.
Conociendo a Katia Klein
Ya os he adelantado, a grandes rasgos, las múltiples facetas creativas de Katia Klein, algo de lo que hablamos también con ella en esta entrevista que le hicimos hace varios meses.
Con su perenne sonrisa y su enorme simpatía Katia nos fue desgranando todo lo que ha sido para ella este vertiginoso último año. Comenzó con el montaje teatral de El sueño de una noche de verano, un montaje tan bonito, como extenuante, no solo por el exigente trabajo físico e interpretativo a que obligaba a todos los intérpretes, sino por el añadido de una larga gira por toda España, con lo que ello conlleva.
Nos contó que, además, sin solución de continuidad, terminó de trabajar en la obra de teatro justo para incorporarse en la serie Amar es para siempre, que nos permite ver a diario su trabajo en la pequeña pantalla, como Fiona, una mujer libre y divertida, que la está haciendo disfrutar un montón. Su cara se iluminaba especialmente al hablar de esta serie, del equipo y de sus compañeros de reparto (especialmente las chicas), con los que ha establecido una especial relación de amistad; está disfrutando mucho de este trabajo y se le nota.
Y si ahí su rostro estaba iluminado, no os digo ya cuando comenzamos a hablar de su libro Llámame rara, que se ha presentado este pasado mes de octubre. Según Katia, este libro es una reflexión sobre qué es lo raro en esta sociedad y si lo que nos parece raro lo es realmente o no. Ella ha pretendido mostrar a los lectores que las rarezas no tienen por qué ser feas, sino que la individualidad (o rareza) es lo que nos diferencia y lo que nos hace realmente atractivos, en definitiva es lo que más puede brillar en una persona.
Katia Klein deportista
Y tras el trabajo, llegó el momento de hablar de otra de sus grandes pasiones: el deporte.
Katia nos contó que lo necesitaba, no solo como pasatiempo, sino que todos los actores deberían hacer deporte como preparación para un trabajo que suele ser intenso en lo físico. Ya no solo por el hecho de llevar una vida de constante movimiento, con madrugones de los gordos a diario (5 de la mañana 😮 y maratonianas jornadas de grabación; sino fundamentalmente porque muchos de los papeles exigen mucho en el plano físico.
Concretamente, nos recordó su último trabajo teatral, en una obra tremendamente física, que la obligaba a moverse muchísimo por un escenario enorme, subirse a un montón de sitios y conseguir que le saliera la voz y llegara a todo el público en teatros tan grandes como se representó.
Pero además, Katia nos dijo que para un actor el deporte es algo básico para estar centrado, pues sin un entrenamiento físico y la conexión cuerpo-mente que proporciona el deporte, es muy difícil aguantar el ritmo de una carrera tan dura y llena de obstáculos como la de actor.
En cuanto a sus variedades deportivas favoritas, Katia nos contó que se inició con deportes como el fútbol, baloncesto o beisbol, pero que lo que realmente le gustaban eran los deportes de aventura, que la buscáramos donde hubiera algo de riesgo (risas).
Actualmente en Madrid, se ha enganchado a dos actividades que la ayudan a realzar esa conexión cuerpo-mente que antes os contaba. Por un lado, el entrenamiento funcional y por otro el Yoga que le permiten canalizar toda la energía que lleva dentro.
Entrenando con Katia Klein
Pero esta entrevista, como todas las de esta sección, no termina de cualquier modo, sino con un entrenamiento con mi súper-compi Paula Butragueño. En esta ocasión nos citó en el Heat Fitness, un local estupendo para realizar entrenamientos funcionales e interválicos. Un lugar que gracias a sus pequeñas, pero súper bien equipadas instalaciones y a todos los conocimientos y trabajo de Carlos y Gregorio se está convirtiendo en un referente para los practicantes en Madrid de este tipo de entrenamientos. Un agradecimiento enorme para ellos.
Para esta ocasión, Paula nos planteó un entrenamiento de fuerza, no muy largo (unos 30 minutos) pero intenso. Su intención era hacer ver, a través de este artículo de la importancia que el trabajo de la fuerza tiene para los runners, que no todo es hacer rodajes o series, sino que para mejorar, hay que trabajar la fuerza.
No os haré spoiler sobre qué hicimos, porque eso mejor que en ningún sitio, podréis verlo en detalle en su web Inspira-fit y en las fotos que ilustran este artículo, pero sí que os adelanto que hubo un poco de todo (sentadillas, peso muerto, abdominales, pierna, dorsales) sirviéndose de diversos artilugios diabólicos (Ketlebell, cajones, TRX, discos deslizantes…).
Un trabajo durillo, pero que nos hizo ver también de qué pasta está hecha Katia, que pese al esfuerzo y a que lo di todo, no perdió la sonrisa… y se ganó la parte de nuestro corazón que aún no era suya ❤❤❤
[box type=»note» align=»aligncenter» width=»500″ ]
- Fotos realizadas por Fran Calderón (@Lasfotosdefran).
- Logo: diseñado por Alejandra Rodríguez Bueno[/box]